Desde que un puñado de jóvenes se reunió en 2017 para formar un grupo de rock situado entre el conurbano y la gran ciudad, Ni Un Hueso fue tomando cada vez más forma hasta llegar a su gran presente. Están terminando un año más que movido, lanzando su disco debut, Un Amanecer en la Oscuridad (2019), y ganando adeptos en diferentes puntos del país gracias a su gran cantidad de shows autogestionados. Para coronar todo lo hecho a lo largo de estos exitosos 12 meses, el quinteto liderado por Nicolás Navarro sacudirá El Marquee el 7 de diciembre, anticipando un 2020 con más planes. Demian Vernieri, saxofonista y corista de la agrupación, se puso la 10 y conversó con SPE acerca del pasado, el presente y el futuro de la banda, reconociendo que a todos los integrantes les cambió la vida iniciar este proyecto.
SPE: ¿Cómo fue la gestación de Un amanecer en la Oscuridad?
Demian Vernieri: El disco se gestó junto con la banda en sí. El plan fue, desde un principio, salir a la cancha con la placa ya grabada, y así lo hicimos. Cuando nos juntamos por primera vez a pautar y encarar el grueso del proyecto, Nico (el cantante) nos mostró los temas que tenía y nos pusimos a laburar sobre eso enseguida. Luego se sumó Juan Cabral (ex integrante de Ojos Locos y Bravura) como productor musical y así es que empezó la grabación.
“Para las bandas que se autogestionan, no existe el concepto de “vivir de la música”
SPE: ¿Piensan que desde lo sociopolítico el nombre del disco encaja?
DV: Encaja para todo lo que, quien lo escuche, lo quiera hacer encajar: es lo lindo de las líricas, cada persona puede interpretarlas como más le quepa. La frase “un amanecer en la oscuridad” está en el último tema del disco, ‘Cuerdas Oxidadas’. Para nosotros, esa frase es la esencia de Ni un Hueso, porque grafica la luz en la penumbra artística que vivíamos antes de arrancar con esto. De todos modos, creo que si lo queremos asociar con el tan esperado retiro del neoliberalismo, también es válido.
SPE: ¿Cómo fue la experiencia de grabar en un templo como lo es Romaphonic?
DV: Es una vivencia increíble e impagable grabar en el mismo estudio donde antes lo hicieron todos nuestros referentes. El lugar mismo transmite música, es difícil de describir, pero se notó mucho en el resultado del disco. El resto de la placa fue grabada en el estudio de Juan, Tomato Tree. Ese es otro lugar igual de mágico que ya sentimos como un segundo hogar y, por suerte, esa comodidad también se siente al escuchar los temas.
“Nuestro público es la mejor carta de presentación”
SPE: ¿Cómo fue la recepción del público en el interior?
DV: Toda persona que se nos acercó (luego de ver la banda en vivo por primera vez), nos dejó palabras hermosas. En mi opinión, esto se debe a lo que muestra la banda en los shows; la otra mitad la hace nuestro público, que es la mejor carta de presentación.
SPE: En el oeste hay varias bandas que la están remando como ustedes. ¿Cuál es el precio que tienen que pagar para vivir de la música?
DV: Hay que entender que, para las bandas que se autogestionan, no existe el concepto de “vivir de la música”, es una realidad triste. A lo máximo que puede aspirar una banda en esa situación es la autosustentación. Vivir de esto es claramente un objetivo, pero hay otras prioridades antes y nosotros elegimos, hoy por hoy, invertir tiempo y dinero en darle esa vueltita de rosca extra a los shows o poder grabar con una calidad superior.
SPE: ¿Cuáles son sus planes para 2020?
DV: La primera mitad del próximo año nos va a encontrar girando y grabando. A partir de julio vamos a estar presentando material nuevo, lo que seguro conlleve a más giras.
*Ni Un Hueso estará cerrando el año el 7 de diciembre en El Marquee (Scalabrini Ortiz 666, C.A.B.A.). Para conseguir entradas, entrar acá