Nuestra música está llena de artistas de gran renombre que dejaron su huella en la historia argentina y Fernando Samalea no es la excepción. Siendo un músico multiinstrumentista, desde el inicio de los ‘80 fue parte clave del rock nacional como baterista de Fricción, Charly García, Gustavo Cerati e Illya Kuryaki entre muchos otros, así como también en sus trabajos discográficos de tango y jazz. Hoy se mantiene vigente al reinventarse como escritor y nos cuenta su vida en una trilogía de libros: ¿Qué es un Long Play? (2015), Mientras Otros Duermen (2017) y Nunca Es Demasiado (2019), en los cuales recorre con detalle sus vivencias trabajando con diversos iconos musicales a lo largo de las décadas.
El trabajo que da inicio a esta tríada, ¿Qué Es Un Long Play?, nos lleva a su infancia, en donde descubre su pasión por la música y da inicio a su camino con la batería. Luego de varias bandas que no terminaron en nada, forma Fricción junto a unos jóvenes Richard Coleman y Gustavo Cerati, quien finalmente decide seguir adelante con su otro proyecto Soda Stereo, por lo que dejó el conjunto. Con una nueva formación, tocan por todo el país durante años hasta que Charly García lo convoca para formar parte de su banda y así vive en carne propia todo el éxito del artista, como también sus momentos más caóticos. Luego de casi diez años girando sin parar decide cambiar de aire y de agrupación, siendo reclutado por Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur para su grupo Illya Kuryaki and The Valderramas.
“Samalea no solo cuenta su biografía, sino que reconstruye con lujo de detalles la historia de nuestra música”
El relato sigue con Mientras Otros Duermen, el cual detalla sus experiencias con el bandoneón. Tras alejarse un tiempo de los grandes escenarios concentra sus energías en explorar nuevos rumbos musicales y graba una serie de discos inspirados en el tango, jazz y algunos matices del rock. Para la última mitad de los 2000 se vuelve a aliar con Cerati participando en su disco Ahí Vamos (2006), y se suma a su troupe de músicos en los que también se encuentra Coleman. Fue tan buena la experiencia que la repiten con la salida de Fuerza Natural (2009), y vuelven a girar hasta que en el 2010 se corta todo en seco tras el trágico y sorpresivo accidente del líder luego de un show en Venezuela.
Nunca Es Demasiado, el final de esta trilogía, recorre el tiempo transcurrido luego de sus años tocando con Cerati hasta la actualidad. A esta altura ya está consagrado como uno de los máximos exponentes de la batería en nuestro país. Se reencuentra con García para participar de sus shows en el mítico Teatro Colón, toca por todo europa con el francés Benjamin Biolay, y junto a Marina Fages hace una serie de conciertos recorriendo todo el país en moto. Indudablemente es un trotamundos que siempre está buscando la máxima expresión artística, ya sea tocando en el viejo continente en venues grandes o compartiendo canciones en lugares pequeños con artistas emergentes.
Además de haber tocado con esas leyendas, también participó en grabaciones con Andrés Calamaro, Joaquín Sabina, Fabiana Cantilo, María Gabriela Epumer, Jorge Drexler y La Oreja De Van Gogh entre muchísimos otros más. Hoy se encuentra preparando un libro de fotos que sirve como complemento gráfico para los tres textos anteriormente mencionados. Aunque su salida está prevista para el 2021, mientras tanto podemos disfrutar de su tríada de escritos, la cual se puede adquirir en todas las librerías y también de forma online.
Con estos trabajos, Fernando Samalea no solo cuenta su biografía, sino que reconstruye la historia de la música de nuestro país como un detective: con mucha claridad y lujo de detalles. Uno puede leer a través de su pluma todos los cambios que van sucediendo, no solo musicales sino también a nivel social. Y qué mejor que leer sobre nuestro rock de la mano de uno de sus principales actores.