Lady Gaga deja de lado su extravagancia para mostrarnos a Stefani Germanotta, una mujer de 30 años tratando de lidiar con las exigencias de su trabajo y una vida amorosa hecha trizas. A diferencia de la mayoría, su rutina se basa en ser un ícono de la cultura pop cuyas crónicas amorosas son comentadas en todo el mundo.
Con el propósito de ser un «making of» de Joanne (2016), este documental dirigido por Chris Mourkabel recopila momentos de la composición y promoción del disco, más la preparación de su debut en el Super Bowl 2017, sin centrarse únicamente en lo musical. Más bien, es un gran ejemplo de que el artista y la persona son indivisibles y, en tiempos de trabajo duro, convivir con ambas facetas puede resultar en un caos.
Vemos a Gaga celebrar tras recibir la noticia de que protagonizará la película A Star Is Born (2018) —por la que luego sería nominada a un Oscar como Mejor Actriz—, cuando minutos atrás estaba discutiendo con su ex prometido. Observamos cómo tiene que prepararse para una entrevista con uno de los periodistas más reconocidos del New York Times, mientras una amiga le cuenta por teléfono que su cáncer no da tregua y está hospitalizada. “Siento que pierdo a todos a mi alrededor”, dice una exhausta Stefani, que debe mantener la compostura en medio del lanzamiento del álbum más despojado y personal que sacó hasta el momento.
“Five Feet Two es el relato más efectivo sobre alguien que creció ante el ojo público y se convirtió en leyenda”
El cansancio mental empeora con la misma intensidad que el agotamiento físico: a causa de la fibromialgia que padece tras una lesión en la cadera, vemos a Germanotta llorar desconsolada por los insoportables espasmos. Todo parece desmoronarse, pero cuando hace música es cuando más plena la vemos; como en las tomas con Mark Ronson y Florence Welch grabando la épica ‘Hey Girl’, o mirando álbumes familiares con su abuela y su papá (una escena imperdible del material). Su círculo íntimo la mantiene a flote, dejándonos descubrir que esa es realmente la gran inspiración detrás de los hits que luego escuchamos.
Esta producción es un must see si te gusta Lady Gaga, pero sobre todo, es una visita obligatoria si todavía no escuchaste Joanne. Entender qué sucedía en su vida mientras creaba este disco bisagra (duramente criticado por no sonar tan pop como sus trabajos anteriores), da otro sentido al concepto del álbum y explica los cambios intencionales en su imagen. “Ahora soy una mujer lidiando con sus problemas, ya no soy una chica”, aclara mientras deja su casa para dirigirse al estudio de grabación. Five Foot Two no es simplemente sobre la vida de una celebridad. Es el relato más efectivo para acercarnos a alguien que creció ante el ojo público y se convirtió en una leyenda del pop; sin dejar de ser, ni por un segundo, una persona con esperanzas y frustraciones como todos.