Fotos por Lucas Lara / @lucaslaraphoto
Un martes como cualquiera de agosto, las calles de Palermo se llenaron de polleras cuadrillé y cadenas. Mientras el sol caía, los fanáticos iban entrando a Groove para volver a ver a Neck Deep desde su último show en el país en 2018. La banda formada por Ben Barlow, Seb Barlow, Dani Washington, Sam Bowden y Matt West regresaba en el marco de un sideshow del festival I Wanna Be Tour de Brasil.
Una vez adentro, los fans se encontraron con una playlist de hits de géneros musicales variados. La espera se hizo un poco larga, quizás por la falta de banda telonera que acompañe y caliente motores, pero mientras tanto, se daban encuentros y conversaciones en la pista. A las ocho y media clavadas, se apagaron las luces y las pantallas proyectaron el VCR que dio por comenzada esta aventura.
‘Dumbstruck Dumf**ck’ y ‘Sort Yourself Out’ fueron las canciones elegidas para hacer despegar a todo el mundo del piso y que el público estalle en los primeros pogos de la noche. En la primera pausa, se escucharon los primeros “Olé olé” de la noche. Interrumpidos por ‘Motion Sickness’, al terminar el tema retomaron con los cantos a pedido del cantante, que mientras tiraba besos al público. “Buenos Aires, somos Neck Deep, es un hermoso lugar con hermosa gente ¡y la energía es tan fucking buena!” gritaba Barlow mientras la audiencia estallaba en gritos.
Las siguientes canciones en seguidilla fueron ‘Gold Steps’, ‘Kali Ma’ y ‘Can’t Kick Up The Roots’ de su álbum más aclamado Life’s Not Out To Get You (2015). Sobre eso, Ben comentó: “sacamos ese álbum hace diez años, es una locura estar en Argentina diez años después y escucharlo en vivo con ustedes”. Cerraron este mini-set con ‘Smooth Seas Don’t Make Good Sailors’ —canción que no tocaban en vivo desde enero en el Reino Unido—.
“Hombres, se van a un costado. Para la siguiente canción necesitamos un pogo de chicas. Pogo de chicas, pogo de chicas, pogo de chicas!” coreaba Barlow antes de arrancar los primeros acordes de ‘She’s A God’. Cuando terminó, dijo orgulloso: “Chicas, la rompieron, eso estuvo muy bueno”. Antes de continuar con la noche, desde el público voló una camiseta de la selección con el nombre de Diego Maradona. Cuando el cantante se la puso, una vez más la gente estalló en cantos de “Olé olé”.
Retomando la promoción de su último álbum Neck Deep (2024), continuaron con ‘Take Me With You’, ‘Heartbreak Of The Century’ y su más reciente single: ‘You Should See Me Now’. “¡Abran esa ronda!” grita el cantante antes de comenzar con ‘STFU’.
“No quiero ponerme muy político. Siempre vamos a estar del lado de los oprimidos, del lado de la gente. Lo que necesitamos en este mundo es menos delirio y más unidad. Tenemos que recordar este sentimiento y estar unidos” fueron las palabras que dedicó Ben antes de ‘We Need More Bricks’. La última canción de la tanda fue ‘A Part Of Me’, un acústico que reversionaron con las guitarras eléctricas en limpio, y salieron del escenario. La audiencia estalló en los típicos cantos de “¡No nos vamos nada! ¡Una más, una más!”
Pero las luces seguían apagadas. Y unos minutos después, los cinco músicos regresaron al escenario. “Ya que lo pidieron tan agradablemente, no estaba planeado, vamos a cantar dos canciones más”, agradeció Barlow. Oficialmente, los últimos temas interpretados fueron ‘December’ e ‘In Bloom’. “Honestamente, esto es por lo que hacemos todo. Un show en vivo, la conexión que tenemos con ustedes y el sentimiento en el aire. Buenos Aires, muchas gracias, nos vemos la próxima vez. Esto fue increíble”, fueron las palabras finales del frontman antes de dar por terminada la noche.
El show fue muy enérgico de principio a fin. No hubo prácticamente momento en el que la banda aflojara, y tampoco en el que la gente dejara de saltar. La retroalimentación entre músicos y público fue constante, con demostraciones de cariño, cantos y agradecimientos. Cada persona que asistió se queda con la promesa de volver la próxima vez, sea dentro de un año o tras otra larga espera de siete.
