El virus llegó a nuestro país hace algunas semanas y nos obliga a quedarnos en casa. Esta situación puede despertar las más diversas reacciones, desde la frustración hasta la alegría, el llanto o la reflexión. Por suerte, distintes artistas se encargaron de dejar plasmadas estas sensaciones en canciones pasadas que afloran hoy, con mayor fuerza, y nos acompañan en esta cuarentena.
Mood orden: Las Ligas Menores — 'Ni Una Canción'
“Tengo un par de cosas tuyas tiradas en mi cuarto y no sé qué hacer”, esboza la lírica. Querés dormir todo el día sin pensar en las cosas que tenés que realizar en casa como, por ejemplo, desechar eso que no necesitas. El contexto de cuarentena nos da la excusa perfecta para eso: despojate de lo que ya no va y liberate de viejas cargas.
Mood independencia: Zoe Gotusso — 'Monoambiente en Capital'
Te mudaste en el momento justo y la cuarentena te encuentra sole en tu monoambiente. Fumás más, dormís menos y todavía le estas encontrando la vuelta a los quehaceres domésticos. Desde acá te bancamos con este tema de una cordobesa que se mudó a CABA y parece estar en la misma.
Mood quiero llamar a mi ex: Daniela Herrero — 'Solo Tus Canciones'
Te preguntás qué estará haciendo, extrañás hablarle y todas las canciones te hacen recordarle, tal como la lírica de este tema. Antes de llamar a tu ex, pensá si realmente vale la pena… Tal vez, solo estás aburride.
Mood encierro: Queen — 'I Want To Break Free'
El clásico de la banda británica es un himno a la libertad, más específicamente, a liberarse del amor que se siente por alguien. Si tomamos su video, en el que se ve a los integrantes limpiando y ordenando una casa, podríamos extrapolarlo a la situación de hoy donde, claramente, más de une quiere liberarse del encierro.
Mood extremista: Muse — 'Apocalypse Please'
“Esto es el fin del mundo, y es hora de que veamos un milagro”, reza esta canción que muestra el extremo al cual podemos llegar, ansioses por encontrar una solución a esta anormalidad. Las horas pasadas mirando la tv, los audios de alguien que vive en la otra punta del mundo y las cadenas nacionales... Las malas noticias parecen no frenar y todo nos convence de que vamos de mal en peor.
Mood reflexivo: Fito Paez —'El Cuarto de Al Lado'
Esta canción es una metáfora de la vida misma, que identifica con su lírica a quienes se replantean qué quieren y hacia dónde van. Pero, entre tanto ruido, encontramos refugios como tocar un instrumento, escribir, dormir o tomar mil botellas. Mirá el videoclip y sentite identificade con cada postal del encierro que representa.
Mood en casa con buena compañía: Ed Sheeran — 'Sofa'
“Prefiero quedarme en el sofá con vos”, nos dice Ed Sheeran en este tema. Él podría viajar a donde quisiera, pero prefiere quedarse en casa con su persona favorita. Lo cierto es que hoy no tenemos esa elección, pero si tenés la suerte de que la cuarentena te encontró bien acompañado, esta canción es para vos.
Mood conociendo a les vecines: Pequeña Orquesta de Trovadores — 'El Loco del 9no A'
La mayoría de nosotres pasamos poco tiempo en casa y, por ende, no conocemos demasiado la dinámica de lo que sucede en nuestro edificio o barrio. Ahora, sabemos a qué hora cocina la de arriba, que el de enfrente tiene un perro chillón y que el del 9no A siempre está haciendo ruido y cantando, más o menos, mal. De esta salimos más unides o buscando otro alquiler.
Mood vagancia: Bruno Mars — 'The Lazy Song'
“Hoy no tengo ganas de hacer nada, solo quiero acostarme en mi cama”. Y si, la verdad que no todes nos sentimos con ganas de entrenar, leer, pintar, cocinar… Y solo queremos tirarnos en el sillón y ver la TV. “No me voy a peinar, porque no voy a ir a ningún lado”: aprovechemos que todavía podemos.
Mood bailando cheesy pop: Bandana — 'Sigo Dando Vueltas'
“No quiero saber lo que me espera, no quiero salir a caminar… Yo me quedo en casa, que nadie me venga a molestar”, pedían las Bandana allá por los 2000, y ahora ven cumplidos sus deseos en esta cuarentena. Ambientado en una casa de muñecas y con outfits acorde, el videoclip de este tema habilita a bailar luciendo lo más raro que tengas en el placard, dándole un toque divertido a estos tiempos.