La música de tías lo tiene todo: calidad, músicos increíbles en escena, letras memorables, performers de primera y una atemporalidad que hace que tres generaciones distintas se levanten de la butaca para bailar “Sexy”.
Sir Rod Stewart se presentó en un Movistar Arena sold out en tres noches consecutivas. Él es un artista que parece no cansarse, pese a la edad, y sus canciones dejan los corazones llenos de una alegría que trasciende el tiempo. No hay que olvidarse que Rod Stewart tiene 80 años, pero eso no lo detiene: cambió cuatro veces de vestuario, bailó, revoleó el micrófono, se movió por todo el escenario, pateó pelotas…
Los cambios en la lista dejaron en claro que tampoco se conforma: canciones distintas cada día, hitazos y lluvia de globos al final. El público coreaba con ganas, y sus acompañantes hacen de todo: no solo cantan con una voz increíble, sino que cuando pensabas que no podían tocar un instrumento más… ahí estaban, sumando uno nuevo.
Cuando suenan los clásicos, todos nos convertimos en tías, nos levantamos de la butaca y cantamos a gritos una canción que —si no sabías que la sabías— la sabés.
