Con solo 22 años, Alvaro Lafuente, más conocido como Guitarricadelafuente, apuesta a sus raíces aragonesas para componer canciones que oscilan entre el indie y el folclore. Desde Barcelona, se prepara para dar inicio a una gira que tendrá lugar en España durante julio y agosto. En charla con SPE, el artista nos habló del futuro incierto de la música en el escenario post pandemia y sobre su disco debut.
¿Cómo está la situación en España para los músicos?
Alvaro Lafuente: Llevamos bastante tiempo desconfinados y de a poco se está volviendo a la normalidad. Se están abriendo sitios públicos y está habilitado hacer conciertos, pero hay algunos puntos de rebrote, así que no sabemos bien qué va a pasar los próximos días. Si hay más casos se va a cancelar todo de nuevo, y eso es una mierda. Ayer comencé a ensayar para la gira que empieza el 15 de julio en Madrid: organizamos conciertos al aire libre y con capacidad reducida. Como va a ser de los primeros recitales de gran magnitud, todavía no sabemos bien qué va a pasar.
¿Pensás que va a ser muy diferente a lo que eran los encuentros antes de la pandemia?
AL: Creo que vamos a tardar en volver a tener la confianza y la libertad de pensar que no puede pasarnos nada. Salir a la calle, acercarse a alguien, abrazar, compartir la misma copa o cosas simples que ya no hacemos. Aquí en España nos abrazamos y nos besamos mucho, por eso es todo muy raro. Con respecto al show en sí, inicialmente íbamos a presentarnos como un trío, pero decidimos que la situación no puede parar las ganas de hacer la música que quiero y vamos en formato completo a apostarlo todo.
Hace poco lanzaste ‘Ya Mi Mamá Me Decía’, un sencillo que tiene una fuerte influencia de tus raíces españolas. ¿En qué te inspirás al momento de escribir?
AL: Mi familia es de Aragón y sin querer he mamado mucho folclore de esa tierra, bastante desconocido a nivel internacional; lo mismo sucede con la jota aragonesa, la castellana o con las muñecas gallegas. Aquí hay muchas variantes diferentes en un mismo territorio y lo interesante es poder descubrir eso. No solo me inspiran esas melodías, sino que de todos los lugares de España puedo tomar algo, tanto del flamenco y de sus estructuras como de las situaciones populares que inspiran mis letras.
Empezaste grabando con el micrófono de la PlayStation y después subiste tus canciones a las redes. ¿Imaginaste que tendrías la repercusión que tenés hoy?
AL: No, para nada. Cuando empecé a adentrarme en el mundo de la música nunca había hecho ningún tipo de concierto ni pensé que eso podría llevarme a algún lado. Compuse canciones en mi casa y, casi que de un día para el otro, las tres que tenía empezaron a repercutir en la gente. A través de Spotify y las redes sociales generé varios seguidores, con lo cual llegaron los shows en vivo, cada vez más grandes.
Dado que tu éxito se dio a través de las redes sociales, ¿le das mucha importancia a estas plataformas?
AL: Son una espada de doble filo. Hoy los músicos que quieren tener una llegada mayor tienen que exponerse o publicar su material a través de ellas. Hace poco escuché una entrevista a Beyoncé donde ella contaba que antes, cuando un artista lanzaba un álbum, la gente lo escuchaba y volvía a hacerlo luego. La música se consumía de una forma más lenta y pausada. En la actualidad, desgraciadamente, a la gente le importa más lo que está haciendo ese músico a nivel personal: si está con sus hijos, con su perro, si está o no en su casa. El consumo se da tan rápido que, si alguien saca un sencillo, la durabilidad del mismo en la escena es prácticamente nula; no como antes que se sacaba el disco, se creaba la portada, el concepto, la gente lo compraba y vivía la experiencia de otra manera. Sin embargo, las redes no dejan de ser una herramienta para darse a conocer.
Sobre todo en el aislamiento, llega un punto en el que agota tanta exposición a las redes.
AL: En España comenzó a hacerse un festival online llamado Yo Me Quedo En Casa. Al principio no lo veía posible y me parecía que la situación, sin quererlo, ha hecho que nuestras vidas se frenaran en muchos sentidos. El hecho de buscar una manera de seguir produciendo y generando dinero para que la gente consuma no me termina de cerrar. La música no puede vivirse a través de un vivo de Instagram. Hay mucha gente a favor de eso, pero a mí no me convence. Digo esto cuando yo mismo hice un directo de esos para el festival, pero sigo pensando lo mismo.
Tus videos tienen un gran sentido de la estética. ¿Te involucrás en el proceso creativo de las grabaciones?
AL: Cuando publicaba en redes y hacía mis primeros conciertos, me encargaba de los carteles para los shows y las portadas de las canciones. Es algo que me gusta y que siento que es importante que esté ahí; lo que ves tiene que acompañar a la música. Con esto de consumirla de forma más pausada y el ritual de comprar un álbum en físico, es fundamental notar que hay un trabajo detrás: una portada desarrollada, una historia que contar de la mano con las melodías. En este proyecto que estoy haciendo, de representar el costumbrismo del pueblo y de la vida rural mezclado con algo más moderno, la parte audiovisual es esencial.
‘Desde Las Alturas’ y ‘Ya Mi Mamá Me Decía’ son adelantos del disco. ¿Tenés alguna fecha prevista para el lanzamiento?
AL: Empecé a grabar en enero y seguí el proceso hasta que nos encerraron a causa de la pandemia. Ahora que tenemos permitido viajar, vine a Barcelona y hemos pasado días grabando y probando cosas para los shows. Estamos aprovechando al máximo el tiempo que tenemos para sacar el LP cuanto antes. Ahora estoy grabando el tercer sencillo y mi idea es que salga en octubre o noviembre.
Cuando esté todo más normalizado, ¿cuáles son tus planes para el resto del año?
AL: En medio de la pandemia tenía previsto un viaje a México. Estamos evaluando cómo replantear la visita y, para el año que viene, extender la gira a Latinoamérica para conocer países como Argentina y Chile. A nivel más personal, mi único plan es poder hacer esta gira en julio de la forma más segura y cómoda posible, terminar el disco y organizar una nueva gira.