Es imposible encasillar a Banzai FC en un solo género. Tampoco es lo que sus integrantes pretenden: afirman que limitarse a hacer un solo estilo sería acotarse demasiado. Formada por Diego Szalko (guitarra y voces), Iván Smalinsky (batería), Bruno ‘El Tano’ Mazzitelli (bajo) y Francisco Azorai (teclados), se trata de uno de los grupos más prometedores de la escena actual. En esta conversación con SPE, Diego Szalko e Iván Smalinsky charlaron sobre su búsqueda sonora, sus colaboraciones con WOS y sus planes para el futuro.
¿Cómo definirían a Banzai FC?
Diego Szalko: Primero es una banda de música. Detrás de eso hay una relación humana de muchísimos años que está en un plano casi familiar. Desde lo artístico le ponemos mucho empeño, amor y pasión por crear algo que nosotros creemos que vale la pena. Por eso también el nombre: «Fútbol Club» como una especie de familia y amigos y «Banzai» como grito de guerra, dejando todo lo que uno tiene en el escenario.
“Este disco es mucho más orgánico”
Hay algo muy porteño en su sonido... ¿de qué manera creen que vivir en Buenos Aires afectó la música que hacen?
Ivan Smalinsky: Banzai está muy influenciado por Buenos Aires. Decir lo contrario sería una falacia.
DS: Va más allá del rock, el funk, el hip hop o la cumbia. Es música de Buenos Aires, nos influye inherentemente. Es el lugar donde vivimos y crecimos. Una ciudad que amamos y odiamos. Se ve más claro en este segundo disco, tiene más identidad de Buenos Aires. Hay mucho tango, que también nos gusta mucho.
¿Qué nos pueden adelantar de Desangelados, su próximo disco?
IS: Este disco es mucho más orgánico.
DS: Lógicamente aprendimos cosas, tuvimos errores. Hubo cosas que no sabíamos en el primer disco que en este mejoramos. El nuevo álbum tiene más madurez sonora y conceptual. Tiene más tango que funk, por decirlo de una manera burda. Más identidad, más raíces argentinas, porteñas.
“Nuestras letras son lo contrario a un panfleto que baja línea”
¿Cómo surgieron las colaboraciones con WOS?
IS: A Valen lo conocieron un día el Diegui y el Tano en una fiesta, estaban tocando la viola y el chabon se puso a rapear. Con Banzai vino a hacer unos temas que quedaron buenísimos. Siempre que surge nos gusta colaborar con él, pero también tiene sus cosas, sus proyectos.
DS: No tocamos con él hace un montón. Quizás en el disco haya una colaboración o nos juntamos, pero puede pasar o no.
¿Cuáles son sus planes a futuro?
DS: La idea es ir sacando las canciones del disco. El primer tema que vamos a lanzar es ‘Desangelados’. El segundo corte de difusión se llama ‘Dedos de Momia’ y tiene una colaboración piola. Ir sacando los temas con video, como sencillos, para después sacar el álbum completo este año. El futuro es muy incierto, todavía no hay fecha de estreno.
Tienen muchas canciones puramente instrumentales, o con muy poca letra... ¿sienten que hay algo que solamente se puede transmitir a nivel sonoro?
DS: A mí me encanta la música con letra. Pero hay algo que tiene la música pura que no ocurre en ese tipo de canciones. Son como puertas que se abren en tu mente para que vos imagines la pintura en tu cabeza, y eso es tremendo. Cuando sucede algo con una poesía bien hecha y con un sonido que está bueno pasa otra cosa que es muy emocionante, y es una locura también. A la vez tratamos que las letras tengan un sentido poético, más que político. Es lo contrario a un panfleto que baja línea.
¿Cómo les afectó la cuarentena?
IS: Fue complejo. Banzai vive del vivo: juntarse a ensayar, tener expectativas para la próxima fecha, preparar un buen show. Banzai necesita eso. Hicimos dos shows por streaming el año pasado y fue una buena alternativa. Pero está muy lejos de la experiencia de tocar en vivo y que el público te de un feedback de lo que haces.
¿Qué diferencia sienten que hay entre tocar en un festival y hacer un show propio?
DS: Es bastante distinto. El festival tiene algo adrenalínico y divertido, porque tocas para un público que no está «ganado», son personas que no te fueron a ver a vos. Es salir a romperla, y eso está buenísimo. A la vez, un show propio te da la oportunidad de hacer cosas más arriesgadas. Cosas más conceptuales, buscadas, detallistas. Son dos modalidades re distintas, están buenas las dos. Me aburriría mucho haciendo una sola.
¿Qué consejo le darían a alguien que está empezando en la música?
IS: El contexto actual es medio extraño para dar consejos, pero el primero que yo le daría a alguien que está empezando es que trate de tocar su música en vivo. También que crea en lo que uno quiere y no cambie para tener más público o llegar a más gente. Tratar de hacer lo mejor posible. Está bueno apuntar a eso desde el minuto cero, apuntar a mejorar.
DS: No ir por lo más fácil, hacer lo que uno cree. También hay que estudiar, darse el tiempo de experimentar y buscar. Hay un legado que está bueno conocerlo para después poder romperlo, o hacer lo que uno quiera.