De la mano de dos Movistar Arena sold out, EMILIA inundó las calles del barrio de Villa Crespo con sus fanáticos. En la fila podías comprar brillitos para usar en los ojos imitando el icónico look de la cantante, además de pósters y remeras. El público contaba con personas de todas las edades: niñas, adolescentes y adultos. Una pasarela de looks extravagantes contrastó con la simpleza de quienes van lo más cómodos posibles a un recital.
La apertura estuvo a cargo de la fiesta BRESH. Esta reciente tendencia está copando los recitales, mientras sus DJ convocados comienzan a abrirse camino en el mundo de los conciertos en vivo. Al salir a escena, Emi llamó la atención de su audiencia con unas gráficas en pantalla de ella como caricatura, casi como una película animada que daba un concepto al show.
Contó con dos cambios de outfit casi cronometrados de los cuales salió del spotlight para reaparecer tanto de unas pantallas que se abrían al fondo, como de un hueco que la levantó desde el piso. La compañía de Duki en ‘Esto Recién Empieza’ y ‘Como Si No Importara’ rompió al público en gritos. A su vez también presentó ‘Rápido Lento’ de la mano de Tiago PZK. El momento más emotivo: dedicarle ‘Guerra’ a su padre que se encontraba en la platea, cantando entre lágrimas. Terminó con una versión más «rockera» con banda en vivo de ‘Cuatro Veinte’, inundando el estadio con papelitos.
