DANTE: UN INCENDIARIO GUERRERO FUNKY

El seductor poeta del hip-hop se adueñó del escenario del Quilmes Rock

Fotos por @acorazonada

Aún reinaba el sol en la tarde del domingo cuando Dante Spinetta tomó el control del escenario en la segunda jornada del Quilmes Rock celebrado en Tecnópolis. Ajeno a la temperatura, el músico se presentó enfundado en negro: remera negra de cuello alto, una manga larga negra debajo, holgados pantalones negros, un gorro negro con una visera y lentes de sol. Mismo plan para toda la banda que lo acompañaba, pero esa monotonía cromática cambió cuando empezaron a sonar los primeros acordes y se proyectaron en el aire los colores más intensos.

‘Rebelión’, que también da comienzo a su álbum Mesa Dulce (2022), fue el puntapié inicial de un set que se centró particularmente en ese disco. Le siguieron ‘El lado oscuro del corazón’ y ‘La movie’, también incluídos en ese mismo disco.

La lista continuó con el lanzamiento más reciente, ‘Starlight’, editada pocas semanas antes. “Perdón que los pedales no me andan, loco. Pero no importa, vamo’ a darle así, a pelo”, fue la sincera disculpa antes de lanzarse con una versión de ‘Deja Boo’ que derramaba sensualidad. Además de ser un excelso compositor, letrista y cantante, Dante es también uno de los mejores guitarristas que tenemos. Sin pedales la rompió igual, haciendo aullar a su PRS Custom 22 brillante como la esmeralda y con esa correa de leopardo que le aportaba un toque kitsch.

Lo mismo hizo durante ‘Humo Digital’ antes de convocar al escenario a su hija, Vida Spinetta, a quién presentó como su “cantante favorita”. A dúo hicieron ‘Olvídalo’, la canción perteneciente al álbum El Apagón (2007) que en su versión original cuenta con la voz de Julieta Venegas. Con una enorme personalidad que contrasta con su talla pequeña, la jóven Spinetta no defraudó.

“Vamo’ a tocar esta que se llama ‘Mostro’, y el que no agita, todo mal”. Abajo del escenario nadie lo dudó y la fiesta fue completa gracias al aporte de la sección de vientos que resplandecían como bola disco con sus metales al rayo del sol. Sin duda, el momento más cool del fin de semana. No hubo nadie que no estuviera bailando y todos alzaron sus manos al cielo cuando Dante pidió ver las manos de todos arriba. 

El cierre del show fue con una extensa versión del instrumental ‘Funk Warrior’ que subió aún más la temperatura para dejar a toda la audiencia encantada, transpirada, derretida cual orgasmo musical y, sobre todo, deseosa de un poquito más. En un día en que el astro rey pegó fuerte sobre el escenario del Quilmes Rock, Dante Spinetta fue el verdadero dueño de la tarde.

SEGUINOS

TAMBIÉN PUEDE INTERESARTE