Pocos artistas a lo largo de la música despertaron tanta admiración desde el público, prensa y colegas como lo hizo Mike Patton. El cantante estadounidense llegó a la fama en 1989 liderando al grupo alternativo-metal-funk Faith No More, y se mantuvo allí forjando una imagen de culto y fundando constantemente proyectos independientes. Tras el anuncio de un nuevo regreso a los escenarios para el quinteto angelino, el multifacético e impredecible frontman confirmó que está trabajando en nuevo material que nada tiene que ver con FNM.
El hombre de barba candado y pelo engominado recientemente se unió al compositor Jean-Claude Vannier para realizar una colección de 12 canciones llamada Corpse Flower (2019), lanzada el 13 de septiembre. La misma combina elementos musicales tales como el soul y el jazz, sin descuidar el estilo retorcido de Patton. Si bien se trata de un álbum tranquilo e ideal para las madres de los fans de Faith No More, no se asimila con la primera escucha.
Por otro lado, la novedad en la agenda de Mike consiste en un nuevo álbum de Tetema, un dúo conformado junto al pianista Anthony Pateras. El larga duración se llamará Necroscape, verá la luz el 3 de abril de este año y tiene un adelanto disponible: el tema ‘Haunted On The Uptake’. A priori, se trata de una de las agrupaciones más experimentales y ambiciosas, artísticamente hablando, por parte del estadounidense. Además, es el sucesor de Geocidal (2014), un debut que superó las expectativas debido a su propuesta electro-acústica, forjada por ambos artistas vanguardistas.
“Mike es como el buen vino: con el correr de los años, su calidad mejora cada vez más”
Citando a Enrique Iglesias, escuchar la obra completa de Patton es “casi una experiencia religiosa”. Desde la fusión que caracteriza a su criatura más mainstream, pasando por la experimentación en Mr. Bungle (banda que formó en 1985, disolvió en 2004 y resucitó el año pasado) y culminando con la ópera italiana en Mondo Cane. Para sus seguidores es un semidiós de constante transformación: se lo hacen notar cada vez que pisa un escenario, en cada oportunidad que aterriza en algún aeropuerto o cuando, simplemente, cae de sorpresa en algún show ajeno. Cada disco, sin importar a qué grupo suyo pertenezca, muestra su talento, capacidad musical y potencia vocal. Podemos asegurar que Mike es como el buen vino: con el correr de los años, su calidad mejora cada vez más.
Para tomar dimensión de su importancia dentro de la escena under americana, entre colaboraciones, proyectos solistas y formaciones estables, Patton suma más de 20 conjuntos musicales, muchos de ellos con actividad en simultáneo. Tomahawk, Fantomas y Peeping Tom han sido otras notables co-creaciones del reconocido y respetado músico; con los dos primeros tuvo varios recitales cuando Faith No More estuvo en un parate indefinido, mientras que el restante destaca por su alto contenido pop, veta que Mike exploró notablemente en el nuevo milenio. Y para potenciar su perfil bajo, cabe destacar que absolutamente toda su discografía ha sido lanzada de forma independiente, aún cuando tuvo su gran momento de fama en los 90’.
A su vez, se anunció que lanzará nuevo material junto a los mencionados Tomahawk. Se trata del primer disco desde Oddfellows (2013) y supone una verdadera sorpresa, ya que el cuarteto completado por Trevor Dunn (bajista en Mr. Bungle), Duane Denison (guitarrista en The Jesus Lizzard) y John Stanier no estuvo activo últimamente. No hay más detalles al respecto debido a que cada integrante está enfocado en sus respectivos conjuntos, pero Dunn informó que en las siguientes semanas habrá más novedades para los seguidores de Tomahawk.
Mientras la gira europea de Faith No More sigue sumando cada vez más fechas (esperemos que vengan a Sudamérica, como lo han hecho en gran medida últimamente), el todoterreno del rock continúa creciendo y aportando a la música, demostrando que es una fuente inagotable de cultura. La fe en Mike Patton está intacta.